Elimina flacidez con el Pepino y el Aloe Vera
Estos productos naturales son mundialmente reconocidos por sus bondades y propiedades en el cutis.
Por una parte, el pepino se encarga de frenar la acción de los agentes que generan grasa en tu rostro, por otro lado, el aloe vera o sábila regenera los tejidos de la piel.
Todas sabemos que el envejecimiento, las arrugas y las manchas, son procesos naturales que se dan con el paso de los años, en cada uno de los seres humanos, no obstante, se está comprobando que con el ritmo de vida acelerado que actualmente se lleva, este proceso incursiona de manera más rápida; haciendo que la piel pierda su firmeza y empiece a sufrir prematuramente arrugas que no debería.
Ahora bien, gracias al avance de la ciencia y la tecnología, se ha llegado a grandes descubrimientos. Uno de ellos son los elementos naturales que hacen bien a nuestra piel, utilizándolos a manera de tratamiento frecuente, para reducir el impacto del entorno en la piel y regenerar las células.
El Pepino
Debemos saber que el pepino es una hortaliza, que está compuesta mayormente por agua, para ser más específicos, un 97% de esta hortaliza es agua. Además, posee una extraordinaria cantidad de nutrientes que benefician al organismo, y por ende, a la piel.
Otra de las cosas importantes son sus componentes antioxidantes, que frenan la reducción de colágeno y elastina. Y por último, el pepino posee un nivel perfecto de poder astringente, que es el que se encarga de limpiar a profundidad el rostro y, controlar los daños del acné.
La Sábila
Por su parte, aparece el aloe vera o sábila, como un excelente influenciador sobre la piel. Esta planta es muy valorada por sus excelentes propiedades para la piel, ya que limpia de manera profunda, quitando toda suciedad que pueda aparecer, y de igual manera evita la obstrucción de los poros. También es un excelente humectante, ya que aporta la elasticidad necesaria para la piel. La sábila o también llamada Aloe Vera, proporciona de manera eficaz la elastina y el colágeno necesario, con lo que evidentemente se evita cualquier síntoma de vejez prematura; esto sumado a su alto efecto antibacterial que corrige el acné.